Por iniciativa de diversas instituciones - comerciales, industriales, educacionales, de servicios, entre otras - surgió la idea de gestionar la creación de una Casa de Estudios Universitarios en Concepción del Uruguay. Luego de una primera reunión, se decidió encaminar las gestiones para lograr una Unidad Académica de la Universidad Tecnológica Nacional yse conformó la "Comisión Pro-Facultad Tecnológica".
Al proyecto se adhirieron de inmediato las ciudades del este entrerriano y una comisión encabezada por el ex-rector del Colegio Superior del Uruguay "Justo José de Urquiza", Profesor Félix Omar Carulla, entrevistó al entonces gobernador de Entre Ríos, Brigadier Ricardo Favre.
Establecidos los contactos con las máximas autoridades de la Universidad Tecnológica Nacional, y de conformidad con ellas, en Acuerdo General de Ministerio se dictó el decreto Nº 2161 del 8 de julio de 1969, constituyendo una Comisión de Estudios Específicos para realizar los estudios de factibilidad correspondientes, en cuanto a la extensión de los servicios de enseñanza superior, por parte de la Universidad Tecnológica Nacional en especialidades técnicas relacionadas con el desarrollo dentro del ámbito provincial.
Dicha Comisión dependía de la Subsecretaría de Educación, a cargo del Prof. Pedrazzoli, y tenía la presidencia del Doctor David Pérez del Viso, profesor de la Facultad Regional de Santa Fe de la Universidad Tecnológica Nacional.
Con fecha del 29 de diciembre de 1969 el rectorado de la U.T.N., como resultado de los estudios de factibilidad mencionados anteriormente, dictó la resolución Nº 487/69 que creó la Delegación Entre Ríos de la U.T.N., la que puso en funcionamiento una Delegación Central en Paraná y otra dependiente de ella, en Concepción del Uruguay.
En el Colegio Superior del Uruguay "Justo José de Urquiza" a los pocos días comenzó a funcionar el curso preparatorio del año académico 1970 de la U.T.N.. El heredero de la organización del país había puesto a entera disposición de la U.T.N. su edificio, oficinas, laboratorios, lo que permitió además la formación académico-administrativa.
De ahí que, por resolución Nº 120 del 3 de abril de 1970, el Rectorado de la Universidad Tecnológica Nacional en ejercicio de las atribuciones del Honorable Consejo Superior resolvió: "Designar delegado del Rectorado para desempeñarse en la Delegación Regional de Concepción del Uruguay, al Ingeniero Guillermo Segundo Gianello, en las condiciones que se especificó en el respectivo contrato". El Ing. Gianello ya estaba desde el primer día de su creación al frente de la Delegación propuesto por la Comisión Pro-Facultad Tecnológica.
A los pocos meses de funcionamiento, con fecha del 13 de Octubre de 1970, y como resultado de una reunión de Decanos y Delegados en la que se trató profundamente el tema, el Rectorado dictó la resolución Nº 432/70, por cuyo artículo 1º dispuso "que la Delegación en Paraná y Concepción del Uruguay funcionen independientemente y en relación directa con este Rectorado".
El 28 de Abril de 1973 el Consejo Superior de la U.T.N., dictó la Resolución Nº 165/73 por la que se autorizó el funcionamiento de los cuatros años de las dos especialidades: Ingeniería Electromecánica e Ingeniería en Construcciones.
El 13 de Marzo de 1975, y como consecuencia de una inspección integral realizada a esta Unidad Académica por el entonces Subsecretario de Delegaciones del Rectorado, Ing. Juan Carlos Irisarri, el Interventor en la U.T.N., Ing. Militar Tomás Persichini, dictó la Resolución Nº 109/75 creando el sexto año de las especialidades Ingeniería Electromecánica e Ingeniería en Construcciones, así como el segundo año de Ing. Rural.
También el Interventor basándose en similar estudio del Ing. Irisarri, dictó la Resolución Nº 110/75, que dispuso que "la Delegación Concepción del Uruguay pasará a funcionar con régimen de Facultad en Organización".
Edificio de la facultad
Hacia la mitad del siglo XIX funcionaban en la ciudad dos aduanas. Una estaba instalada en la zona del "puerto viejo" y estaba constituida por una precaria casilla de resguardo, y la otra se localizaba en el pleno centro. Esta última dejaría de funcionar como consecuencia del acuerdo de San Nicolás que dispuso la supresión de los derechos de tránsito.
Como resultado de la libre navegación de los ríos decretada despues de Caseros, Concepción del Uruguay se convirtió en un puerto de ultramar de sostenido movimiento, sobre todo por la producción explotable del Saladero Santa Cándida. Por esta razón el gobierno provincial decidió encarar la construcción de un edificio adecuado para la aduana.
La obra comenzó apenas iniciada la década del 50, pero se vio interrumpida al federalizarse el territorio entrerriano y pasar las aduanas exteriores a jurisdicción nacional. No obstante, en el año 1856 parte del edificio se encontraba habilitado y funcionando de acuerdo con su propósito.
Un informe de un inspector de aduanas del año 1868, nos dice al respecto: "El edificio construido con toda solidez, fue hecho con la intención de hacerse de altos, que al efecto están hechos los arranques a una o dos varas de altura, y que por falta de recursos del gobierno de esta provincia, en aquella oportunidad no se llevó a cabo, que poco después fue ocupado por el gobierno de la Nación desde 1856 hasta ahora con esta oficina".
Llegado el año 1869, nos encontramos con que el gobierno de la Nación no había hecho ningún esfuerzo por dar término a la obra que con tanto acierto comenzara el gobierno provincial. Un informe correspondiente a dicho año expresa: "El edificio que ocupa la aduana está edificado como para servir al objeto que llena. Es hermoso y de grandes proporciones y a pesar de que no esta terminado, presenta todas las comodidades que esa aduana necesita...El personal es completo y práctico en el conocimiento de sus obligaciones".
Hoy, un siglo y medio despues, esa misma calle, la "Calle del Puerto", nos conduce a nuestra Facultad, que deposita en todos nosotros el resguardo de esta porción de historia.